En común

A veces pensamos que lo inesperado es el mejor resultado que podríamos obtener. Cuando las cosas se tuercen y salen bien. El vivir la noche con locura y esperar el amanecer para asegurarnos de que comienza otro día. 

Mi mayor fuente de inspiración es el cielo. Mi inquietud por conocer a alguien con quien compartir mis pensamientos sin ningún tipo de remordimiento. Situación la cual saliendo de casa lo primero que haces es mirar el color del cielo, las nubes y el sol. Entonces piensas en alguien que coincidiría en ese momento con lo que tú dices. Alguien con quien chocar y decirle: Hoy el cielo está precioso.

Cajas de madera

Desde pequeña me han gustado los armarios. Creía que si me escondía dentro nadie podría encontrarme nunca. Que me protegía del mundo exterior. Que si yo no podía verme en la oscuridad, nadie podía.
Siempre me gustó esconderme y pensar. Jugar. Sola. Montar mi propia vida llena de ilusiones y sueños, de fantasías y miedos. Muchas veces se me pasó por la cabeza girarme y encontrarte. Aún espero el primer encuentro contigo. En un armario. Bailando a tu lado.

Estúpidos pensamientos

Estoy enamorada de mi misma. Ayer , cuando llegué a mi casa, no se me ocurrió otra cosa que poner el disco de Reload de Metallica en el equipo de música, subirle el volumen, y tumbarme en la cama mirando el 
techo -blanco- y sin pensarlo me puse a pensar en el mismo orden que tengo seleccionado desde hace tiempo de cosas importantes de mi vida: Familia-Amigos, estudios, amor, yo. Dándome cuenta que me importo tanto que hasta me ignoro, siempre me dejo para el final. Como en las obras de teatro, en los musicales, en el cine, lo más importante está en el final. Pues si yo no fuera lo que más me importara, mal vamos. 

De hecho, estuve tanto rato mirando el techo que aparecieron cosas pequeñas moviéndose aquí y allá sin rumbo. Eran notas musicales. Cada nota musical compone un trozo de una canción. Yo necesitaba organizar mis notas musicales para que la canción de mi vida siguiera algún tipo de camino coherente, no fácil. Para que diera lugar al éxito deseado en cada persona: tener una vida llena de caprichos, ignorante y llena de cosas por conocer.

He estado encerrada en una caja en forma de corazón durante semanas. Nunca estuvimos hechos el uno para el otro, todo era una mentira tan profunda que realmente yo misma me la creí. Había llorado tanto durante toda mi vida que se habían agotado en el momento menos oportuno. Al amanecer, el sol brillaba con más intensidad y noté un ligero olor a lágrimas secas en la almohada. 

Intenciones reprimidas

Se me para el mundo cuando no puedo escribir las palabras más bonitas.

Nunca la cagué. Soy de esas personas indecisas que deciden las cosas estrictamente -o si o no- sin términos intermedios. Una no puede dudar si quiere a alguien, si está enamorada o si quiere estar con él.

Nunca ilusioné. Soy de las pocas personas que les duele hacer daño a los demás porque yo misma he estado en sus puestos y lo pasé fatal, creía que nunca saldría de ahí.
Tengo ganas de decirles a todos que paren de quererse, que el amor no es para siempre, que duelen sus historias, que paren. El mundo se suicida. Soy persona a ratos, cuando me apetece serlo.
No quiero que me quieran, sólo que me abracen.

Recordando momentos que hacen que me sienta a tu lado. 

Tu voz. Un eco que retumba mis oídos. 

Tu manera de actuar. Como la resaca que dejan las olas en la mar.

Mi vida. El rodaje de una película. La mayoría de escenas planificadas, el resto son espontáneos que hacen la grabación más divertida. Lleno de detalles. 

Echo de menos los abrazos, los besos especiales y las sonrisas. Las bromas y su olor. Las burlas y sus manos. Vuelve. 

Nos rodeaba el mundo.
Un montón de luces entre noche y frío. Gente y vehículos acechaban nuestro espacio. Y yo cada vez entraba más en mí. Veía a través de él. Frente a frente escuchábamos el silencio de la ciudad.

Fotografías y algo más

Me encantaría hacerte fotos con el mismo lugar de fondo, cada día. En nuestro nido. Donde el cielo cambia de color y el sol no brilla de la misma manera. El agua no tiene el mismo tono ni el mismo movimiento. Los árboles y las piedras no tienen el mismo contraste. Los animales vienen y van. Lo único que no cambia, eres tú. Tan constante como sorprendente. Cada día algo nuevo. De esta manera nunca sabré si te conozco del todo, por eso estaré contigo siempre, para romper mi curiosidad.

Mi más deseado sueño

Me encanta que sea ácido y a la vez dulce. Cómo una tarde fría, muy fría, dónde la gente sólo sale para lo necesario y ansia por llegar a sus casas para buscar el calor hogareño. Parezco la única persona a la que le guste callejear en este ambiente. Las luces con poca intensidad y titiritar. Rasgar los dientes, ya no sé si rabia o frío. Lucho por todos mis proyectos deseando escapar de mi rutina y de mi vida actual. Que todo se quede aquí y en mi memoria. Que mis recuerdos no se desvanezcan.
Me apetece. Es eso lo que me apetece: Volar a lugares más fríos y ver nieve todo el tiempo a través de una ventana mientras una hoguera intenta iluminar mis ojos de vivacidad y una manta tapa hasta mis peores pesadillas. Y que mis ojos a punto de cerrarse puedan verte a mi lado, rodeándome con tus inconfundibles brazos. Todo sería mucho más cálido si rozaras mis labios muy despacito, como si fuera la primera y la última vez que lo hicieras. Entregándome toda tu pasión. Expresándome todo tu amor. Dejándome claro que nunca te irás de mi lado.

Un momento..

Me dispongo a pensar a pesar de mi estado de pesimismo actual. Normalmente lo evito, por no distraerme con cosas insignificantes.
Y estaba tan ida con otros temas, que se me olvidó pensar en ti, se me olvidó soñar contigo. Cuando mi vida, ahora, empezaba a cobrar algo de sentido, un pequeño detalle pudo arrasar con todo.
Mis lágrimas no me dejan ver las estrellas. Súbeme hacia ellas hasta poder sentirlas cerca, pues así sabré cuánta parte de tu corazón depositarás en mí.
Y vuelvo a impacientarme por tu señal. Pero no tardes, porque voy a estar esperándote siempre.

Dos extraños

Pasé de ignorarte durante toda mi vida a que te tuviera en mente a cada segundo, en cada sueño. Que te observara el máximo tiempo posible y crear coincidencias por cruzarme contigo aunque fuera por un segundo. Crear situaciones en las que verte durante más tiempo. Acercarme a los tuyos, que también son -en parte- míos. Nunca te hablé. Siempre me hablaste tú y buscabas cualquier excusa por dirigirme la palabra.
Y recordando momentos dónde aprovechabas el momento de "libertad" por perder ese respeto del día a día hacia mí y atreverte a tocarme, a hablarme sin que nadie pudiera sospechar lo que se te pasaba por la mente en esos instantes. A tener tu cara tan cerca de la mía que incluso me sentía incómoda a pesar de la conexión mutua.

Un montón de sensaciones inútiles.
Cada mañana me pongo la misma canción a partir del mismo punto de partida y termina justo cuando llego a mi destino. Exactamente 7:27 minutos. Y me pregunto por qué motivo no pasa lo mismo con mis objetivos y metas de futuro. Siempre hablo de lo mismo, es cierto. Pero me preocupa y no dejo de darle vueltas. Ojalá supiera cuándo terminará algo y hasta qué punto voy a llegar. Así podría prevenir lo que va a pasar y el error que puedo cometer y, ante el miedo que pueda venir, enfrentarme con más tranquilidad y sin pillarme desprevenida. Se sostiene la teoría de que el ser humano aprende mediante la repetición. Pero mis repeticiones no se dan como vencidas porque por cada error, cada olvido. Recordar sólo lo bueno hace que en un futuro vuelvas a equivocarte. Está bien recordar buenos momentos, pero no se deben dejar pasar los peores porque podrían afectar al siguiente suceso.

Felicidad artificial

Mis ganas por crear un futuro mejor disminuyen poco a poco, día a día. No me arrepiento de mis pensamientos, de mis hechos, de mis lecciones, de mis engaños, de mis errores ni de todo lo demás que pudiera perjudicarme en algún momento. Pues sin ello no llegaría donde he llegado ni sería lo que soy. Hoy por hoy, lucho por mí -¿por quién sino?-, por rodearme de gente que valga la pena. Por conseguir mi propósito y la vida que siempre he deseado tener -aunque me parezca imposible-. Todo lo que me rodea es mierda, por ahora. Las cosas cambian constantemente y muchas de mis ideas no son estables.
No todo se resume en medias naranjas y demás.

8 y Nosotros

Fue la máxima sonrisa que pude expresar.
La noche en que nos conocimos supe que me necesitabas. Pero fui tan tonta al creer que tenía algo de mi que te pertenecía...
Él sabe que le quiero. De mujer a querida, y de querida a no querida. Aún así lo sigo esperando cada noche, a la misma hora, dónde siempre. Como todos, te prometen el cielo mientras se masturban con tu cuerpo. Pero el sufrimiento no se va. Te va pisando a medida que pasa el tiempo. Te estás volviendo loca, me digo, me dicen. Sigo buscando nuevas ansiedades -cuerpos que se entregan-, pero no consigo olvidarle, sólo recordarlo.
Date una oportunidad, mujer, no te dejes vencer. Intentaré no creer que todo el que se me acerca se quiere acostar conmigo.
Vivir como soy, ser siempre consciente.
Mi corazón sólo me merece a mí. Es realmente difícil comenzar de cero en un mundo nuevo, pues nada de miedo se eleva en mis llorosos ojos de luto. El peor ciego no es el que no quiere ver, sino el que ve con los ojos de que no lo ha de querer.
Y siempre cabe la duda de ser un títere más. Maricones los que visten y desvisten cuerpos en su juego de muñecas.
Existen mejores personas, mira a tu alrededor, no están por todos lados ni está sólo en una sola persona.
Y recuerda, cuando te desnudes ante alguien, al corazón no se llega por entre las piernas. NO PUEDES OBLIGAR A NADIE QUE TE QUIERA.

Sigo pensando que ya no soy la misma, para bien o para mal, he cambiado.
Igual que los demás, pero diferente en mi. Como cuando buscaba mi camino sin pararme a pensar. Viviendo cada momento de pleno éxtasis y perfecta felicidad. Estudiando mi grado de locura hasta estallar, hiperactivamente sin poner los pies en el suelo en esta sociedad de cuerdos.
Puedo cambiar mi motivación a cada paso que doy, puedo cambiar hasta cuando quiero volver a errar. Cambie lo que cambie, pasará lo que tenga que pasar.
Intentando buscar a cada segundo la misma sintonía acústica que invadía mis mejores días. Evadiéndome cada vez más de mi mundo y, así, volviéndome un poco más social. Me dan igual los demás, siempre me han dado igual. Dicen que todo lo que hacemos y decimos es para ser aceptado por los demás. ¿Qué más me da ser aceptada por los demás si la persona que más me importa y a la que más quiero soy yo misma? No es ni por asomo puro egocentrismo. Seamos realistas. Pues quien realmente dé su vida por los demás asegurándose su muerte, no se quiere para nada ni quiere a los demás. Vivimos en una sociedad egoísta, irreal y demagoga. Dónde todos somos víctimas de ello, queriéndolo o sin quererlo. Como cuando te enamoras de un cabrón el cuál te lo está poniendo difícil para tener algún tipo de relación en vez de enamorarte de alguien que te lo pone fácil porque quiere tenerte en su vida y no perderte, no ser una más. Somos complicados hasta para esto. Y es incomprensible e inevitable.

Perdí el camino y, desde entonces, no supe encontrarme.
¿Qué puedo considerar importante? ¿Cómo puedo saber que selecciono bien entre lo que quiero?
Si ni si quiera yo sé lo que quiero, lo que me gusta, lo que se me da bien o mal...
Elegir por qué camino andar no es tarea fácil, y menos aún cuando el destino ya está escrito.

La vida dando vueltas sin parar. Sin sentido alguno.
Altibajos, como las ondas bajo el agua, como las olas del mar, como los peces que siguen corrientes marinas, como las ballenas para respirar.
Y mi camino sin lucecitas que guían, que avisan, que aconsejan, que previenen, está perdido. Sin árboles en los que apoyarme a pensar y descansar. Hace tiempo que no me paro en uno de ellos, ando y ando sin parar, sin salida, el sendero es recto pero sin final, infinitamente infinito.

No existe la realidad. No existen los hechos, los pensamientos, los sentimientos, las palabras, las sensaciones, las corazonadas, las conexiones -y desconexiones-. No existe ni la nada. Porque nada siempre lo fue todo. No escapéis porque no hay salida. No la hay. Si la hubiera ya habríamos escapado todos.

No es ningún tipo de reflexión ni un descarte de posibilidades para darle a mi vida un toque de engaño llevando a cabo todo tipo de futuro. Ya que es síntoma de felicidad una sonrisa, aunque esté profundamente guardada por miedo a salir. La vida. Un sinfín de sucesos y contradicciones. Sin solución ninguna, tal cual. Pensamientos más maduros, al fin. Una vida repleta de decisiones de las cuales menos de la mitad tenemos miedo a elegir. La vida de una adolescente se complica cada vez más llegando a cambios de humor drásticos y severos. Plasmando fotografías con el arte de interpretar sonidos y sentimientos difíciles de mostrar. Y un mar de dudas nos invade a todos. La vida, una onda que emite vibraciones que suben y bajan a un ritmo no-constante. La unión de vuestras sonrisas, forman la mía. Vuestra felicidad, es mi felicidad.

Mi mañana es para luchar. Ahora voy hacia un lugar donde no existe el miedo. Me marcharé montada en la brisa del mar. Dormiré en vuestra memoria y viviré en vuestros corazones. He puesto a sentar mi venganza. Sacaré a bailar a las penas.
Quiero volver a dormir con tu olor. Y a los besos de mi memoria les digo adiós. Tú me preguntabas cuánto te quería yo.

Hoy me desperté con ideas confusas. Ser lo que siempre había soñado. Que nada me ate aquí, es lo único que pido y quiero. Por favor, dejarme elegir, ya vendrán tiempos mejores. Pero de momento, no me presionéis más, ya tengo bastante con decidir lo qué haré dentro de un segundo. Me desperté con la persiana bajada y temiendo el abrirla para ver pasar un día más con pocas ganas de mirar hacia adelante. Estos días estoy algo pesimista.

A veces me siento tan débil... Como si no pudiera caminar.
No tengo fuerzas para nada, ni si quiera para abrir los ojos.
Y pensar que podía llegar a este punto en tan poco tiempo. Me suena, he vivido esto alguna vez en algún tiempo no hace mucho. Dije que nunca más volvería a pasar esto por nadie, lo dije y no lo estoy cumpliendo. Pero era el prototipo que yo busqué durante años, quizás no era él para siempre, pero eso nunca lo iba a saber. Está claro que ya no. Le quise como nunca, aunque no me crea, aunque otros no me crean. Y me ha perdido, pero le estaré esperando siempre. Hasta que otra persona aparezca en mi vida, claro y creo. Seguiré siendo la misma pero no igual.
Necesito distraerme, divertirme, estar con mi familia de siempre y conocer a nuevos. Ver otras caras, salir de la rutina, hacer locuras cuales consecuencias no aprendo nunca -cosas de adolescentes, supongo-.
Y hoy. Quizás hoy. Me siento más sola que nunca.
No por nada, sino por todo. El supuesto nada para mi lo era TODO.
Gracias a los que estáis a mi lado cada día y a los que no estáis cada día, pero estáis.
Monday♥, siempre me acompañas en los peores momentos. Necesito un piano cerca estos días próximos, me hará mucha falta. Tener los dedos encima de las teclas y ver, sentir, tocar y saborear la música, tener un lápiz agarrado y deslizarlo sobre el papel, tener un pincel en mano y exponer sentimientos mirando a través del caballete, tener un bolígrafo y escribir lo primero que se te pase por la cabeza. Algunos entenderán, otros no me importa que no me comprendáis.
No estoy nada pesimista pero sí decaída.
Ya sólo me queda asumir, olvidar y esperar
Aún recuerdo el primer día que quedé contigo a solas. Hacía frío, demasiado frío. Mis piernas se congelaron y se durmieron de estar tanto rato sentada en la misma posición. Tampoco sentía mi mano, no quise guardarla en el bolsillo por no soltarla de la tuya.
No estaba nerviosa, teníamos algo de confianza -ya viste mi peor faceta antes-.

Y ahora, noto el corazón más grande, late cada vez más lento pero más fuerte. Me siento paralizada. Mi mirada se pierde entre hilos. No consigo desenredar este lío. Siempre he salido sola de todos los apuros. Y ahora... ¿por qué no? Todos saben que me gusta vagar en solitario, pero no sentirme sola. No estoy sola, no me siento sola, pero sí vacía. Dolor no es lo que sufro, creo que es algo que toca más profundo.
Me siento como un pez en medio del mar que nada solo, sin rumbo, no hay caminos, hacia ninguna parte. Y si me sumerjo, no oigo nada, nada más el sonido del agua cuando cae en medio de la nada, como cuando no me sentía vacía ni tenía dolor ni mi corazón latía de esta manera.

Hoy, me despertaron para comer. No tenia ganas de levantarme. Quería quedarme en la cama el resto del día. Tampoco quise mirar por la ventana por si el sol había venido a verme, o bien, se había escondido o estaba lloviendo. Me puse a pensar, a enfrentarme a mis problemas -miedos- y a meditar sobre lo que estaba viviendo estos últimos días. Si lo ignoro, volverá a pasarme y no es eso lo que quiero. Recordé casi todo lo que dijiste desde que te conocí, lo que me dijeron los de mi alrededor y los tuyos, lo que me pasó antes de conocerte y cómo salí de ello. Y al hacer frente a lo que ahora mismo más temo, recordé el sueño que tuve la noche anterior y el mensaje que quiso darme mi subconsciente, me sirvió de gran ayuda. También pensé en errores ajenos a mi, de otras personas de mi alrededor. No puedo sentirme pesimista. Es demasiado tarde para todo. Me queda mucha vida por delante.

Me mudo. A otro mar. Más sumergible, más tranquilo, más comprensivo conmigo. Soy como un plancton más -un organismo más-. Algo más que lucha por no dejarse llevar por las corrientes del fondo submarino.
Y no puedo evitar buscar la felicidad. Por eso me mudo y empiezo una "nueva vida", como aquél que dice, en otro mundo. Volver a sonreír con facilidad. Escuchar música sin pensar.

Días extraños. Observando días atrás. Mar de dudas, mar de felicidad. Aún recuerdo, el día que más odiaba del año desde antes de hacerme mujer, éste lo amé. También sé que, mis días amargos acaban siendo dulces si tú estás a mi lado, y que aunque mi almohada actúe como un pseudo-tú, te siento como si nunca te hubieras marchado. Qué extraño.

...y tan extraño que, en el fondo, aún pueda sentirte. Que cuánta preocupación tenga se apodere de mi en las horas de más oscuridad. Mientras el miedo de mi consciente hacia mi subconsciente va aumentando, éste me envía mensajes de lo más significativos. Días en los que la música me invade por completo.

Monday, primavera andare in un'altra vita♥


PD: textos antiguos terminados:) esta entrada va desde abril hasta agosto!

Son bastantes noches pensando dónde estarás. Imaginando tus brazos protegiéndome de cualquier mal. Y aunque no sea creíble, lo único que me ronda en la cabeza eres tú. Pienso qué debes pensar, si alguien te ha hablado de mi, si sólo quieres una simple amistad o tomar unas copas de vez en cuando y nada más.
Si algún día te pudiera ver y sin miedo contarte todo lo que quiero de ti.
Ramera y despiadada distancia.

Sigo viviendo de los sueños y/e ignorando la realidad. Me faltan horas, y más horas, aún, para estar contigo. Vuelvo a tener paciencia. Y me subo por las paredes cuando te noto tan lejos. Me tranquilizas si me altero, me altero porque te quiero y no te tengo. Pero tú desconoces mi melodía. Canción hecha para toda vida. Y es que los lunes se me hacen eternos, sólo yo podría deslizar mis manos entre blanco y negro y entender por qué sonidos esperados a dar a expresar algo, se quedan callados, se cierran y se van naufragados.
Blanco y negro entre dedos. Esperando a ser palpados con armonía y suavidad, serenidad. Arte. Sonidos. Un segundo de silencio en mi melodía, está durando demasiado.

Y si los silencios son extraños, que lo sigan siendo. Lo extraño no se sabe, lo que no se sabe se siente más, y lo que se siente más es lo que no se cuenta.

Parece increíble que cuando dejas de buscarlo, lo encuentras. Y de quien menos te lo esperas. Qué rápido pasa todo. Hasta hace poco más de una semana todo era perfecto, lo bueno ya estaba durando demasiado. La mitad de lo importante se ha volcado y ningún cambio parece haber para volver al pleno auge de vida. Mientras tanto, me entretendré con un Carpe Diem hasta la próxima -buena- etapa.
Yo no soy ese tipo de persona que por miedo renuncia a todo. Yo soy de los que luchan contra el miedo hasta vencerlo; de los que si lo pasan mal en un futuro, ya vendrán tiempos mejores; de los que disfrutan el presente y se preocupan demasiado por el futuro pero sin llegar a poner en duda el estar bien o mal, qué más da; de los que venciendo al miedo, se hacen más fuertes y luchan contra metas más altas y que no están al alcance de cobardes. Y si me gusta andar sola, es porque tengo miedo, y al miedo le planto cara.

Eres la última cosa que se me cruzó por mi mente. Desde entonces tengo miedo a pensar. Ayer hablé de miedos, hoy hablo de todo lo que rodea el miedo.
Bien, supongo que cualquier tipo de relación se basa en la confianza y en la sinceridad. Y yo me pregunto: ¿por qué la gente insiste en mentir a los demás y se queja por sentirse solos/as? Luego sólo unos pocos están a tu lado.
Pasó demasiado rápido. No tuve tiempo ni de decirle que le quería, porque realmente era así. Ni yo me imaginaría caer tan deprisa en ti. Después de todo lo que me ocurrió en tiempos pasados, cada vez era más difícil conseguirme. Llegaste y, sin más, llamaste mi atención. Confié demasiado rápido en ti, quizás fue ese mi fallo. Pero tampoco pensé que fueras así, sigo estando segura de que no eres así. Algo escondido debe haber sino a qué viene tanto misterio y tanta excusa. Ahora es tiempo de que me vaya.

Una reflexión entre otras...
Cuántas cargas he llevado para tan pocos años. Yo le quise, y a veces él también me quiso. Cómo no haber amado aquellos ojos fijos. Puedo pensar que no le tengo. Sentir que me ha perdido. Mi voz buscaba el viento para tocar su oído. Ya no le quiero, es cierto, pero cuánto le quise. Será de otra. Como antes de mis besos, su voz, su cuerpo claro y sus ojos infinitos. Lo que eres me distrae de lo que dices. Compartiré mi sonrisa con cada persona que se me ponga al frente. Parece que al más falso o a la más falsa, premio le van a dar. El tiempo cual rápido pasaba fuera de las paredes de la habitación en la que disfrutábamos parte del goce. Las ventanas chorreaban agua y empañadas de vaho. Mi brazo se estiraba largo y el puño se abría para tocar tu ansiosa piel. Nunca dí todo, por no decir que no dí nada. Porque no fui yo ni te traté como quise y como te merecieras si me hubieses amado. Te tengo cogido por "los huevos", porque si quiero joderte la vida sé cómo hacerlo. No pasa nada. Cada momento es cada vez más lento. Nadie sabe qué decirme para animarme. Puesto que es lo único que me propuse conseguir. Y haciendo lo que pienso perderé la razón. Mirarme bien. Con tantos palos encima debería aprender la lección. Pesa mucho la tristeza. Regalarme fuerza para afrontar la situación. Esto no es nada nuevo. Yo me llamo música. Durmiéndome en tu pecho y tú despertándome a besos. ¿Y si me estoy enamorando sin verlo y sin saberlo? Ojalá pudiera. Ni si quiera yo me sé mi vida. Podría vivir a meses. Cada mes una vida diferente, alguien diferente, que me rodeara gente diferente, tener a alguien diferente... No estaría mal divertirme para el poco tiempo de vida que me queda. Quién sabe cuándo moriré yo y cuándo morirás tú, y él, todos. Mientras tanto puedo disfrutar sin pensar en lo malo que pueda pasar. ¿Y por qué todos se fían de mí? ¿Acaso alguien sabe mis intenciones? Tendré fama de buena. Y de tan buena, tonta. ¿Buscar a alguien? No. Esperar a que llegue sólo. Tú ves en mis ojos que he dejado de llorar. Incluso ni siquiera he empezado a llorar. Porque no merece que caiga nada por él. Jugaré siempre con mis deseos. Mis oportunidades pasan rápido y soy lenta de reflejos, por lo que no las he cogido cuando me han rozado el costado. No sé cómo de mi vida se marchó. Algún día pensarás algo que marqué en ti, porque sé que cada día piensas en mí. Cometí errores, pero jamás fui infiel. Quizá quisiera volver a épocas anteriores. A veces te extraño, pues contigo aprendí a amar. Gracias, irónicamente, a aquellas personas que jodieron años de relación. Gracias, una vez más, a las que jodieron pero ayudaron sin querer. Sé que lo que yo he sentido por alguien, a otra también le puede pasar. Una lucha entre dos. Yo siempre ganaba al principio pero acabo perdiendo. No sé si por avaricia, por egoísmo o por ser fiel. Largos paseos por la playa pensando mientras la brisa marina acariciaba mi pelo, mientras los dedos de mis pies se mojaban con el agua sin querer. Porque tengo frío, y no hay nadie que me calme esta ansia y estos nervios. Quizá es cómo un héroe. Con valor lograré crecer. Aún tengo batallas por ganar luchando por cada página diaria de mi libro. Tengo fe en mi. Vivir es aprender. No hay nada que temer. Sólo con sueños sabré cómo vencer. Le daré la importancia que a mi me dé la gana. Mi alma entregaré a quién me muestre, en manos, la suya. Y todo mi cariño y amor depositaré en quién prometa cumplir, con ojos encandilados, compartir el libro conmigo. Pues feliz seré si en un castillo me casaré. Al atardecer, y el banquete sobre las diez. Luna llena reflejada en el mar presumirá. Estrellas desearán amor para cada uno de los invitados. Unas rosas lanzaré con truco para quien yo desee promesa de blanco. Olerá a sal. Pues dulces yo serviré. Y dulce yo seré. Sonrisas mostraré. Seré mejor de lo que soy. La caída fue desde muy alto, pues apenas me hice daño, ahora más fuerza me reclamo. Dijiste que te irías mientras tus labios se reían. Sólo me limité a decirte adiós. Las estrellas me dibujan amor cada noche, aunque alguna noche olvidan mi existencia. No me encuentran, no saben quién soy. Cuando yo crea oportuno terminar, terminaré. Pues todas las noches pienso y abrazo la almohada con fuerza antes de dormir. Lamento por si mi vida terminara al próximo amanecer. Temo perder. Pero hacia adelante yo iré. Crezco día a día y mi alma se alimenta de avaricia, ira, lujuria y egoísmo. Pues de todo eso tengo sed. Rómpeme las alas que me incitaron a volar, a tocar el cielo. No soy esclava de nadie. Pues si vuelo, sólo espero no volver a caer. Por eso tengo miedo de repetir el proceso otra vez. No necesito nada, necesito alguien. Y advierto que no os será fácil ganar esta partida. Pues dejaron pedazos de valor marcados, rotos y sin ordenar. No necesito ayuda.

PD: Texto de las navidades pasadas

¿Acaso no debería tomar su mano? Me ayudó cuando me caía al suelo. No es que me guste caerme, es que soy cobarde. Tengo una sensibilidad especial y una gran facilidad para sonreír, también para enamorarme pero no para querer.
Las personas que realmente me conocen saben que soy independiente pero que si estoy sola, ansio.
Verde y marrón, no pueden hacer gris.

Quiero encontrarle.
Decorados navideños. Luces parpadeantes. Villancicos a punta pala. Árboles adornados a dos colores, o tres. Nieve próxima. La sensibilidad abunda y los regalos también. Hay crisis económica pero todos quieren demostrar el mínimo aprecio por alguien con un detallito, cuánta vergüenza.
Y yo, caminando sola por la calle mientras el frío se desliza por mis facciones, callo y pienso. Tímida con la cabeza agachada como si no quisiera saludar a los conocidos y no ver a los desconocidos. Pienso con desorden; y dentro de mi desorden hay un orden. Y en mi rostro siempre una sonrisa para todos.
En estas fechas desesperamos por buscar nuestra media naranja o otras mitades.

Andaba con prisa cuando el frío rozaba mis mejillas y hacía llorar mis ojos. Llovía mientras yo escuchaba It's me de Alice Cooper. Se acechaba una extraña olor que no era la de humedad como de costumbre. Aceleré el paso. Pensé que era una buena idea subir el volumen al audio y cambiar de canción aún no terminada la anterior. Y mi mundo está tan jodidamente ido que no quiere unirse a ninguno más. Nada sana, nada crece.

He olvidado cómo expresarme, el buscar palabras para explicar lo que está pasando o describir lo que no tiene nombre.
Todo caduca con el tiempo. El amor también. La gasolina del coche, por ejemplo: si olvidas que se va a acabar te dejará tirado en medio del campo. Voy a quedarme aquí todo el tiempo que haga falta. Estoy esperando la casualidad de mi vida, la más grande, y eso que las he tenido de muchas clases. Sí, podría contar mi vida uniendo casualidades. La primera y la más importante fue la peor. Ya no quedan casualidades buenas. La culpa es mía, que las gasté muy rápido. El mundo se está volviendo egoísta. No, y no llores para que no pase.
¿Tú conoces algo que dure siempre?


PD: Ya digo que son recopilaciones de textos. Voy por las navidades del 2009! xDDDD

...little things

Las cosas cambian. La distancia cambia esas cosas. Páginas nuevas y quizá libros nuevos. No estoy esperando a terminar el libro, sólo dejo pasar el tiempo. Y lo que pasó, pasó.
Me han robado los sueños, me han jodido el futuro. Han hecho de mi vida, más granitos de arena para repartir en las playas dónde nunca voy a parar mis pies.
La lejanía. Los sueños. Esos sueños que te vienen un dia a la cabeza porque sí y acaban siendo metas. No, metas no, sueños. Aquellos que deseas cumplir sola. Hasta que aparece en tu vida la persona más importante, más apreciada, más querida, por mi parte. Entonces ahora el sueño es doble. Eso que perseguías, ahora lo intentas perseguir con alguien que quieres que lo persiga contigo, o simplemente, que esté allí, a tu lado.
Nunca he tenido prisa en irme, más bien porque aún me quedan personas a las que querer un tiempo más y que no pasen a ser sólo recuerdos.
Pero parece que algunos no entienden lo amargo que es vivir como lo hago yo. Es verdad, tengo cambios de humor tan repentinos que puedo ponerme a llorar y la mínima tontería puede hacerme reír. Pero aún riéndome, no quiere decir que esté bien ni que sea feliz.
Querer y enamorarse está pasado de moda. Ahora lo que está al día es ser un adicto al sexo. Y que algunos lo utilizan como un 99% de su, en teoría, relación. Pues si no es asi, mienten cuando dicen "te quiero".
Pueden pasar dias, meses, años luz... porque de algo yo sí estoy segura es que estoy realmente enamorada. Y no había sentido lo que estoy sintiendo esta etapa de mi vida por una persona, corriente para los demás, que tanto marca mi vida. Porque mi vida, ahora se ha convertido en su vida. Estoy en sus manos. Mi corazón esta en sus manos, colgando de un hilo llamado amor o orgullo, pero al menos lo está. Qué dificil es amar. Qué complicado se hace vivir cuando no eres correspondido. Y aún más que dificil y complicado es que te mientan diciéndote que te aman. Es que no entiendo el por qué de muchísimas cosas, es eso lo que me pone nerviosa. Y cuando quieres aclararlo todo y que te digan la verdad, pues o no te dicen nada o te mienten de nuevo. Entonces vuelvo a caer. Y al tiempo se vuelve a repetir lo mismo. Pienso si yo tengo parte de culpa, y aún no la he visto. No me quiero salir con la mía ni querer tener yo toda la razón. Pero no soy culpable de nada. Y si lo pienso es porque yo no me siento así. De lo contrario, me estaría arrepintiendo y pidiendo perdón haciendo todo lo posible por solucionarlo. Pero no tiene solución, ni la tendrá nunca, hasta que se diga la verdad y nada más que la verdad. Hasta que se demuestren sentimientos y las palabras con hechos y detalles.
Que nadie nunca me pida que le olvide porque, queriéndolo o no, no lo haré. No porque no quiera, sino porque no puedo. Si, yo pensaba que si quieres, puedes. Pero este es un caso peculiar y fuera de lugar al que aunque quiera, no puedo. Muchos no entenderán lo que escribo. Y menos si lo escribo en una espécie de blog.
Aseguro que mis pensamientos no los sabe nadie y puedo llegar a imaginarme cosas que incluso parecen imposibles.
Mis sueños rotos. Algo que llevo pegado a mi hace mucho. Está hecho pedazos. Sólo me queda recordar y llorar si tengo lágrimas que derramar.

Te quiero. No será lo último que escriba, sino lo primero. Puede que acabes engañándome, lo sé y me da igual. Desde que estoy contigo he empezado a sentir, a vivir. Y no quiero morir en vida ni encerrarme después de un engaño. Prefiero que nos llevemos a matar, a que no nos llevemos. Yo también tengo dignidad. Y pienso luchar y aguantar hasta que alguien o algo se interponga entre los tres: tu, yo y nosotros.
Entonces habré malgastado una de mis más apreciadas vidas.
No te quiero, te amo. Y eres lo mejor ha pasado por mi vida y también lo peor. Eres la persona que me ha hecho más feliz y la que ha hecho que me den ganas de tirarme por el balcón. Eres la persona que más quiero y la que más odio. Pero te quiero. Y eso es lo que puede con TODO. Aunque no deba ser así, por orgullo y venganza nada más.
He sido esclava de mis sentimientos, de mi persona. Lo seguiré siendo hasta que le deje de querer.

El enamoramiento es una enfermedad psicológica. Por eso cuando alguien está enamorado se sabe, por los síntomas. Porque como en cualquier otra enfermedad, todos tenemos los mismos síntomas. Y aún no han inventado un remedio o vacuna para esto que acaba siendo una pesadilla.
Me miento a mi misma para ser feliz, eso no tiene nada de malo, lo hacen todos. No creo en el destino porque odio pensar que no soy yo la que controla mi vida, entonces yo no tengo destino, para mi no existe. No creo en las relaciones extramatrimoniales. La gente debería aparearse para siempre, como las palomas, o los católicos. O bien, enamorarse para siempre como hacen muy pocos. La gente hipócrita acaba siendo infeliz. Ellos sabrán que hacen con su vida. Lo malo es que joden y putean la de los demás.
Entonces, todo lo que me ha pasado y está pasando durante este último medio año, ¿me está dando señales de que mi vida está terminando? ¿Y quién hay a mi lado? ¿Me quedo sola otra vez?

PD: Estoy recopilando textos que hice hace tiempo:) Obviamente este no es mi estado actual, el de ahora es mucho mejor^^

Algunos recuerdos

Había una vez dos personas que se encontraron por pura casualidad, dos personas que nunca pensaron encontrarse. Y mucho después, ahi siguen. Cuando tú estás todo es mucho más rápido, apasionante, lleno de vida. Tus ojos me muestran algo que no soy capaz de explicar con simples palabras. Y tu calor me entra en lo más profundo. Puedo hacer muchas crónicas sobre mi vida, pero en cada crónica deberías aparecer por algún lado. Me acompañarás hasta el fin del mundo y volveremos a empezar.
Retrocedo unos años atrás, miro mis errores, miro cómo estan pintadas las cosas y pienso que en ese momento no tenían solución, ahora ya sé qué podía haber hecho.
No es el tipo de error que todos cometemos o que todos pensamos, es otro tipo de error, algo que me cambió la vida por completo y puede que lo vuelva a hacer otra vez.
Demasiadas lenguas parlan, casi todas mienten, pero, ¿quién dice la verdad? Me castigan por querer de verdad, por ser sincera, por intentar no hacerle daño a nadie... y me lo pagan así. Soy clara aunque tenga los pensamientos con mil hilos de los cuales no sé cual coger. Aún no sé nada, pero no tengo nada que hablar. Callar y no fastidiar. No me importa el qué dirán. Bebiendo ahogo mis penas y la soledad. Dibujo sonrisas falsas sobre el papel, con un lápiz solamente, unas gafas de sol bien oscuras tapando la triste mirada y una enorme melena que tape mi cabeza, que no deje volar mis pensamientos, labios poco gruesos intimidándome a besar a alguien y a no decir nada. Pues toda verdad que salga de mis cuerdas será callada, será desafiada por unos seres enormes, que me pueden, mentirosos.
¿Y piensas que no voy a echarte de menos si ya lo hago cuando llevo 5 minutos sin ti? ¡Por dios si aún huelo a ti! Si, y mi camiseta huele a ti, mis pantalones, mi piel, todo huele a ti... y tú, ¿dónde estás? ¿por qué no estás aqui? Te recuerdo, sólo te recuerdo. Recuerdo cómo son tus besos, tus abrazos, tu voz, tus caricias, tu olor, tus manos, tu cara, tu rostro, la explosión de sentimientos. Respiraciones fuertes, besos, caricias, ojos cerrados. Y vuelo muy alto, cuando estoy contigo sólo sé que volar. Entre mis brazos y mi pecho tengo un vacío enorme, y es que me siento incómoda al no tenerte entre ellos.
Me complace mirarte. Sólo con que me miraras, mi corazón palpitaría más rápido. Pero, esa sonrisa. Esas carcajadas que te entran sin más, las burlas que me haces imitándome, y compartir risa contigo. Que me dices del momento en que me abrazas, ¿qué malo me puede pasar?.. Que me dices del momento en que me besas, que alguien se atreva a preguntarme cuando nos estamos besando porque le diría que estoy arriba, en un lugar muy muy alto y muy muy lejos de la realidad.
Haces que mi soledad no me ahogue. Porqué eres tú el único que puede hacerme feliz, y si soy feliz, te quiero aún mucho más. ¿Por qué te vas? Dime, ¿por qué? ¿por qué no podemos irnos los dos? Cada día que pasa, mi deseo está más cerca.
Diría yo que he pasado cosas peores. Te necesito conmigo en cada momento, necesito estar contigo y que no te separes, que no me sueltes, que no te vayas de mi lado. Porqué no puedo soportarlo. Haces que me olvide de todo lo demás y sólo me preocupe por ti. Pero cuando no estas conmigo, rompo a llorar.
Los sueños que te atreves a soñar, se vuelven realidad. Algún día pediré un deseo a una estrella. Despertaré muy lejos de las nubes. Donde los problemas son como gotas de limón. Lejos, muy por encima de las chimeneas. Ahi será donde me encontrarás.